Con la llegada del verano todos pensamos en momentos de disfrute. Buen tiempo, comidas y cenas con los nuestros fuera de casa, realizar actividad física al aire libre o en el agua, viajar, … El estar embarazada no tiene porque ser una excusa para poder disfrutar del verano.
El tip mágico es cuidarse del efecto del calor, pero intentar mantener los buenos hábitos adquiridos durante el embarazo y adaptarse al estado de la gestación.
El exceso de calor puede provocar cansancio en la embarazada (sobre todo en 3er trimestre de gestación), deshidratación, sensación de mareo, inflamación de manos, tobillos y pies,… Teniendo unas precauciones básicas para cuidarse de los efectos de las temperaturas extremas, no hay riesgo ni para la madre ni para el bebé. ¡Una botella de agua y el abanico son tus MUST este verano!
Los cambios de nuestras rutinas en los hábitos de vida saludable que hemos adquirido (si no teníamos ya de antes) durante el embarazo, también se ven modificados en la época veraniega. Mantenernos en nuestro estilo de vida saludable sobretodo en alimentación, actividad física e higiene postural, hará que podamos disfrutar mucho más del verano durante el embarazo.
ALIMENTACIÓN
* importantísimo asegurarse un adecuado aporte de líquidos para evitar deshidratarnos con temperaturas más altas.
– bebe agua
– evita el consumo de bebidas demasiado azucaradas o con cafeína
– aumenta el consumo de ensaladas, frutas y verduras (siempre bien lavadas)
¡Recuerda…! una hidratación adecuada nos ayudará a controlar el estreñimiento, el hinchazón de piernas y pies e infecciones de orina (síntomas muy frecuentes durante el embarazo y periodo estival)
¡¡Sandía, melón, melocotón, piña,… son de temporada!!
* continua con tu rutina de alimentación de embarazo, dieta variada y equilibrada, realizando comidas no muy copiosas varias veces al día, evitando periodos de ayuno prolongado.
– prioriza alimentos de fácil digestión
– evita alimentos procesados, fritos, rebozados
– evita carnes y pescados poco cocinados
* disfruta de la comida y la compañía, no estás castigada, los caprichos puntuales son para disfrutarlos.
ACTIVIDAD FÍSICA
* buena época para hacer paseos o caminatas al aire libre con familia y amigos que disfrutan de más tiempo libre
* evita la actividad moderada durante las horas centrales del día
* calzado cómodo, ropa holgada y de fácil transpiración
* continua con tus rutinas de fuerza y elasticidad en un lugar fresco o climatizado ¿porque no en remojo en la piscina o en la playa?
REPOSO – SUEÑO
* escucha a tu cuerpo y mantén el equilibrio entre la actividad y el reposo
* sigue manteniendo tu higiene postural correcta durante el descanso y sueño (pide almohadas o cojines si te hacen falta)
* si los cambios de rutina o el calor excesivo te producen insomnio:
– intenta mantener una temperatura adecuada en la habitación
– ropa ligera y cómoda para dormir (o nada si lo prefieres)
– evita cenas copiosas, exceso de cafeína, teína, chocolate…
– si estás en 3er trimestre de embarazo, evita beber mucho líquido al final del día para no tener que levantarte con tanta frecuencia durante la noche
– si dispones de más tiempo libre, puedes iniciarte en la meditación, ¡seguro que te ayuda!
– si a pesar de todo te toca ver las horas pasar… ¡llévate un buen libro y disfruta! (tardarás un tiempo en encontrar huecos de lectura).
PROTECCIÓN DE LA PIEL
* extremar los cuidados de la piel, el embarazo es un estado de hiperestrogenismo que favorece la aparición de manchas en la piel (sobre todo en la cara)
* evitar exposición solar en las horas centrales del día
* aplicar crema solar de alta protección si exposición solar y volver a aplicar cada 2 horas
* utilizar gorro o sombrero para aumentar la protección de manchas en la cara
* gafas
* ropa de barrera
PIERNAS y PIES HINCHADOS
* al final del embarazo y más en verano es frecuente que se inflamen las piernas y pies. Para prevenir o aliviar estos síntomas:
* realiza ejercicio moderado o camina ligera 30 minutos todos los días
* piernas en alto siempre que puedas
* moviliza las piernas y pies con frecuencia
– levantarse y caminar un rato
– movimientos circulares de tobillos, ante-dorso flexión del pie, ejercicios de puntas a talones…
* evita estar demasiado tiempo quieta en la misma posición
* evita ropa muy apretada y utiliza calzado holgado transpirable adaptado a tu nueva talla ¡vestidos, sandalias,…!
* evita tener piernas cruzadas en sedestación
* masaje de piernas (pon previamente la crema en la nevera, ¡notarás mayor alivio!)
* si viajas: hidratante bien y evita largos trayectos sin parar (para caminar y mover piernas). Si esto no es posible, valora la posibilidad de utilizar las medias de compresión.
¿PREPARADA PARA UN VERANO ESPECIAL?
Deja que el verano te llene de energía, disfruta de tí, de tu embarazo, de tu vida en pareja-familia… Después nacerá un bebé que romperá este equilibrio y tendrás que reencontrarte en otra versión de tí misma. Seguro que también serán veranos especiales, pero nunca más acompañada del latido del corazón de este bebé en tu vientre. Siente y disfruta de cada momento. El futuro ya llegará.